5 infracciones que no conocías y que conllevan multa
Conducir bajo los efectos del alcohol, superar la velocidad permitida o no ponerse el cinturón son algunas de las infracciones más comunes que conllevan una multa. Sin embargo, hay otras de las que quizás no se habla tanto y pueden acarrear penalizaciones de hasta 3.000 euros en los casos más graves.
Cinco infracciones que no lo parecen y tienen multa
Aunque todas ellas se mueven en una franja de entre los 80-200 euros de penalización, alguna puede llegar a los 3.000 euros. Para no tener sorpresas con gestos que podrían parecer insignificantes, en este artículo se plantea una introducción a las faltas sancionables en la carretera.
- Música alta. Cada municipio de España se rige por una normativa distinta en cuanto al número de decibelios permitido. Pero, en casos graves la multa puede ascender a los 3000 euros. La Dirección General de Tráfico (DGT) recomienda evitar un volumen demasiado alto porque puede implicar agresividad o una distracción al no tener consciencia de lo que sucede alrededor.
- Tocar el claxon. El único fin para el que se permite su uso es el de evitar un accidente. Todo lo que esté fuera de ese motivo es sancionable, desde utilizar este recurso para llamar la atención a alguien o para saludar.
- Comer y beber al volante. Es probable que esta infracción sea más conocida, pero presenta un detalle que podría pasar desapercibido. Si ocupas el asiento del conductor ni siquiera cuando el coche esté parado o ante un semáforo en rojo está permitido.
- Cartel de venta. Seguro que todo el mundo ha visto alguna vez un cartel pegado a la ventana de un coche en el que se anuncia su venta. Su prohibición se debe al peligro que conlleva quitar visibilidad. Aunque el coche permanezca estacionado, en algunos municipios pueden considerar sancionable anunciar así la venta de un coche.
- Cruzar el paso de cebra muy despacio. En este supuesto no se tienen en cuenta factores como la dificultad para moverse que pueda tener, por ejemplo, una persona mayor. El ritmo al cruzar un paso de peatones tiene que estar justificado, si no es así y dificulta la circulación de los coches podría suponer una multa.
